Activistas y especialistas en favor del medio ambiente se pronunciaron por la promoción de una educación climática formal en las escuelas, campañas, talleres y cursos en comunidades mediante todos los recursos y medios posibles, como internet y redes sociales, así como promover la transición energética del actual modelo basado en combustibles fósiles a energías limpias y aplicar realmente el principio de que quien contamine pague.
Lo anterior en la 6ª Asamblea para la capacitación de Formadores Climáticos, proyecto de la organización Juntos Por la Paz (JunPaz)que cuenta con el apoyo del Congreso estatal, y en esta ocasión con el de la presidencia de la Mesa Directiva para abordar el tema “Educación climática”.
Las y los participantes, Alice Oriani de Rivero, de la organización Flor de Asfalto; Emili Fajardo Hernández, de Sostenibilidad Global; Mónica Vullig Garza, de Green CO2, y Armando Enríquez Romo, de Vasco de Quiroga presencia siglo XXI, se pronunciaron también porque en el centro de esta educación se coloque el cuidado del planeta y la naturaleza, se fomente la alimentación sana y natural, se promueva la participación ciudadana en la protección ambiental y el reciclaje de residuos, así como en la separación correcta de estos, entre otras acciones.
Con la participación de Edgar Martínez Novoa, de JunPaz, y Enrique Toscano Pacheco, como moderador, las y los ponentes respondieron desde sus experiencias, activismo y formación profesional a las preguntas sobre qué aportes se han logrado desde la educación ambiental a la protección y cuidado del medio, las acciones que más han impactado o dado resultados y lo que aún se puede y debe hacer para este fin.
Afirmaron que el diseño de los Objetivos para el Desarrollo Sostenible de la Agenda 2030 es uno de los mayores aportes, pues definirán el futuro planetario, así como el fomento del amor y pasión por la tierra y la naturaleza, mayor conciencia social sobe el tema.
Llamaron a hacer de esta educación una práctica permanente y cotidiana, a entender que ante la magnitud de la degradación ambiental las acciones individuales y locales ya no bastan, sino que se requieren acciones mayúsculas y colectivas, que la situación ya es prácticamente irreversible y las medidas por tomar deben orientarse a la adaptación de esta nueva realidad.
